Desde su concepción, Windows to Infinity y ExpoTour Itinerant nacieron con una idea muy clara: crear una experiencia artística de impacto sin dejar una huella negativa en nuestro entorno. Esta exposición monumental no solo quiere tocar los corazones… también quiere respetar el latido de la Tierra. Por eso, hemos llevado al límite nuestro ingenio para reutilizar, reciclar y dar nueva vida a todo aquello que otros desecharían:

• Containers industriales reutilizados que han sido transformados en espacios escenográficos espectaculares. En vez de fabricar desde cero, hemos apostado por restaurar.
• Vegetación rescatada de zonas en proceso de limpieza o poda, reubicada para formar parte de escenarios naturales con alma.
• Materiales escénicos reciclados: maderas, metales, telas, cristales… todo lo que puede tener una segunda vida, aquí la tiene.
• Estructuras modulares desmontables, pensadas para viajar sin dejar rastro, sin generar residuos, sin dañar los lugares que nos acogen.
• Tecnología de bajo consumo, luces LED, sistemas de audio optimizados y programación inteligente para reducir el uso energético.
• Packaging reutilizable, incluso en nuestro almacén interno de montaje y desmontaje.
• Decorados hechos a mano sobre materiales sostenibles o recuperados de antiguas instalaciones teatrales y audiovisuales.

Cada detalle de esta exposición ha sido pensado desde una profunda responsabilidad: hacer un arte que no destruye, sino que transforma.

Nuestro futuro se construye con respeto

El arte también puede ser ecológico. La belleza también puede ser sostenible.

Y Windows to Infinity lo demuestra en cada rincón, en cada decisión, en cada visión.

Gracias por formar parte de esta revolución silenciosa que busca emocionar… sin contaminar.